El pasado Miércoles Santo hizo irrupción con paso firme la nueva cuadrilla de María Santísima del Mayor Dolor y además cubrieron sobradamente las expectativas que sobre ella tenía la Cofradía de la Resurrección. En la retina de todos está todavía la primera chicotá que fue espectacular, desde la salida hasta la primera revirá ya en la calle Nuestro Padre Jesús Nazareno. Dos marchas consecutivas, con un acompasado avance decidido, sin vacilaciones y llevando en volandas a la Señora de la Calle Granada.
Ayer domingo día 13 de marzo, como colofón a una preparación concienzuda, y apara encajar nuevas incorporaciones que vienen a reforzar la originaria formación, tuvo lugar el último de los ensayos preparatorios al ya muy próximo Miercoles Santo, dirigido por un gran equipo de capataces y contraguías.
Estos chavales y no tan chavales le pueden al paso, trabajan concentrados sin escatimar esfuerzos, tocan con sus dedos el cielo y se gustan cuando suspenden sus cuerpos por unos segundos interminables para sobre puntillas iniciar la chitotá con racheo de talones al ritmo que les marca su sobrado corazón, y todavía quieren mejorar.
Sin duda nos brindarán una noche de Miércoles Santo de las que atraerán más integrantes, de las que forjan un estilo propio, de las que hacen de la trabajadera un modo de vida, una lanzadera al traspasado Corazón de María Santísima del Mayor Dolor y que quién les observa explote en una recogida, que nos muestran como cargada de electricidad suficiente, para abastecer su fe durante los 365 días de espera hasta el próximo encuentro con su Virgen, la Señora de sus corazones.
Un pequeño homenaje a estos «Ratones» , en imágenes que nos muestran a las claras el esfuerzo, la concentración y sobre todo que los ensayos no son un juego, sino una dura preparación al esperado momento del Miércoles Santo, donde se dá el ciento por uno. Que lo disfrutéis.
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