¿Con qué frecuencia sueles agradecer?...
Pero no pienses solo en lo bonito, lo bueno, lo agradable. ¿O es que solo sabes dar gracias por lo que te gusta, lo que te parece de provecho?
Si aun no eres capaz de agradecer "una desgracia", una injuria, una calumnia... o simplemente algo que no salió como esperabas, posiblemente tienes una visión un tanto distorsionada de Dios, muy "próspera", al estilo de muchos fariseos que solo buscaban "la bendición".
Pues resulta que Dios, más que El Creador es El Padre y todo lo que nos sucede en la vida posee su "visto bueno". Así es, todo lo que pasa, ya pasó primero por las manos de Dios. Al menos esa es la Fe de los auténticos Cristianos y para muestra los sufrimientos de Jesús y sus apóstoles.
El agradecimiento es por tanto el sello de los Hijos de Dios, caracterizados por la "pobreza de espíritu". Pero pobreza en el buen sentido, esa que incluso alaba El Maestro en el sermón de la montaña cuando dice: "Bienaventurados los pobres de Espíritu porque de ellos es el Reino de los Cielos" - Mt 5,3
Ser agradecido demuestra saberse poseedor de nada, dueño únicamente del propio pecado y la debilidad, como los santos, que lejos de alardear sus prodigios se percibían constantemente necesitados de la Gracia de Dios... por eso sabían agradecer TODO:
Los premios de la vida como frutos del trabajo de Dios en ellos.
Las desgracias como un castigo muy pequeño comparado con sus grandes pecados.
En este día, valora el proyecto de Dios aunque de momento no lo entiendas, da gracias en todo, por todo y a todos. Lo repetimos en misa cada vez que vamos: "Es nuestro deber y salvación DARTE GRACIAS SIEMPRE Y EN TODO LUGAR..."
¿Quieres hacer esta Cuaresma la voluntad de Dios?
"En todo dad gracias, pues esto es lo que Dios, en Cristo Jesús, quiere de vosotros" - 1 Tes 5,18
Pero no pienses solo en lo bonito, lo bueno, lo agradable. ¿O es que solo sabes dar gracias por lo que te gusta, lo que te parece de provecho?
Si aun no eres capaz de agradecer "una desgracia", una injuria, una calumnia... o simplemente algo que no salió como esperabas, posiblemente tienes una visión un tanto distorsionada de Dios, muy "próspera", al estilo de muchos fariseos que solo buscaban "la bendición".
Pues resulta que Dios, más que El Creador es El Padre y todo lo que nos sucede en la vida posee su "visto bueno". Así es, todo lo que pasa, ya pasó primero por las manos de Dios. Al menos esa es la Fe de los auténticos Cristianos y para muestra los sufrimientos de Jesús y sus apóstoles.
El agradecimiento es por tanto el sello de los Hijos de Dios, caracterizados por la "pobreza de espíritu". Pero pobreza en el buen sentido, esa que incluso alaba El Maestro en el sermón de la montaña cuando dice: "Bienaventurados los pobres de Espíritu porque de ellos es el Reino de los Cielos" - Mt 5,3
Ser agradecido demuestra saberse poseedor de nada, dueño únicamente del propio pecado y la debilidad, como los santos, que lejos de alardear sus prodigios se percibían constantemente necesitados de la Gracia de Dios... por eso sabían agradecer TODO:
Los premios de la vida como frutos del trabajo de Dios en ellos.
Las desgracias como un castigo muy pequeño comparado con sus grandes pecados.
En este día, valora el proyecto de Dios aunque de momento no lo entiendas, da gracias en todo, por todo y a todos. Lo repetimos en misa cada vez que vamos: "Es nuestro deber y salvación DARTE GRACIAS SIEMPRE Y EN TODO LUGAR..."
¿Quieres hacer esta Cuaresma la voluntad de Dios?
"En todo dad gracias, pues esto es lo que Dios, en Cristo Jesús, quiere de vosotros" - 1 Tes 5,18
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